A continuación veremos que es el Modo protegido de Internet Explorer.

El Modo protegido en Internet Explorer es una característica diseñada para dificultar que software malintencionado en instale en nuestro equipo.

Además de ayudarnos a proteger el equipo de software malintencionado, permite que se instalen con nuestras autorización controles ActiveX o complementos cuando se inicia sesión como administrador.

Esta característica se habilita desde Opciones de Internet –> Seguridad.

Y podemos comprobar si está habilitada o no por el icono y leyenda que se nos muestra en la Barra de tareas de Internet Explorer.

El modo protegido está activado de forma predeterminada en las zonas de Internet, intranet y sitios restringidos.

Internet Explorer, además de advertirnos de si una página web intenta instalar software, nos mostrará una serie de advertencias cuando las páginas web intenten ejecutar determinados programas.

Se nos mostrará una advertencia si un programa intenta ejecutarse fuera de Internet Explorer y fuera del modo protegido, ya que esto le permitiría tener más acceso al equipo de lo recomendable. Esto suele ocurrir cuando un sitio web utiliza un complemento para ejecutar un programa en el equipo.

En el caso de que se mostrase una advertencia de que se está intentando ejecutar un programa, si tenemos varias páginas web abiertas es conveniente que nos aseguremos de cual es la que intenta ejecutar este programa antes de dar nuestra autorización.

Podemos evitar que nos aparezca esta pregunta para un determinado programa activando la casilla No volver a mostrar la advertencia acerca de este programa, pero realmente tampoco es tanto trabajo para la seguridad extra que implica que se nos pida esta autorización.

El Modo protegido puede, en determinadas circunstancias, impedir una descarga o la ejecución de un programa a través de Internet en nuestro ordenador. Si esto ocurre, lo que por seguridad NO debemos hacer es desactivar el Modo protegido y seguir adelante. Si la ejecución de ese programa se ha denegado es por algún motivo, no por gusto.

Tampoco debemos dar nuestra autorización cuando se nos solicite sin ver antes qué programa es el que debe ejecutarse y si confiamos en él.

Son cosillas como esta las que hacen más seguro a un sistema operativo, pero son a la vez las que llegan a provocar pequeñas molestias en el usuario (como si la seguridad se pudiera lograr sin este pago, pago que se produce en absolutamente todos los sistemas operativos si realmente quieren ser seguros).

Lo que no podemos pretender es tener un sistema operativo que nos de seguridad y que no nos cause ninguna molestia de este tipo (petición de permisos para determinadas acciones, por ejemplo).