A continuación veremos los formatos de compresion de archivos.

Estamos bastante familiarizados con los programas de compresión de archivos tipo WINZIP o WINRAR. En otros tutoriales hablaremos de como funcionan estos programas, pero de momento vamos a ver qué es un archivo comprimido y cuales son los principales que se utilizan.

Estos archivos son de una utilidad bastante grande, ya que no sólo nos permiten comprimir archivos reduciendo así su tamaño, sino que también nos permiten agrupar muchos archivos pequeños en uno solo, facilitando así su transporte (es mucho mejor guardar uno o dos archivos que veinte). También nos permiten agrupar aquellos archivos que practicamente no utilizamos, pero que no nos interesa eliminar, ahorrando espacio en nuestro disco a la vez que los organizamos de una forma que nos resulte fácil localizar uno de sus archivos de forma fácil y rápida.

Una buena prueba de la utilidad de este tipo de programas es que esta fue precisamente una de las primeras utilidades que se desarrollaron. Ya a principios de los años 80 existían programas para comprimir archivos, siendo uno de los primeros el programa Compact, desarrollado para Unix, y el programa SQ, desarrollado para trabajar bajo CP/M y DOS.

Pero la verdadera revolución en este campo llegó en 1.985, con la salida del compresor ARC, que por primera vez permitía realizar las tareas de comprimir y empaquetar en un solo programa (hasta ese momento había que recurrir a dos programas diferentes, uno para comprimir los archivos y otro para empaquetarlos).

Vamos a ver a continuación una serie de compresores y tipos de archivos comprimidos. En esta serie vamos a ver los más populares tanto para entornos DOS como para entornos Windows, aunque algunos de ellos o bien tienen versiones para Linux o bien son compatibles con este sistema operativo.

ARC.- Desarrollado en 1.985 por System Enhancement Associates (S.E.A.), pronto se convirtió en un estándar dentro de los compresores. Aunque su tasa de compresión no era excesivamente alta si que era bastante flexible, gracias a sus numerosas opciones. Los archivos generados tienen la extensión .ARC.

LHA.- Desarrollado en 1.988 por Haruyasu Yoshizaki, se trata de un software de libre distribución. Su facilidad de manejo, tasa de compresión y rapidez hicieron que se impusiera en varios mercados, si bien en un principio el hecho de que solo estuviera disponible en Japonés limitó su implantación fuera de ese país. Los archivos generados pueden tener la extensión .LZH, aunque también utiliza la extensión .LHA. Aunque no dispone de una interfaz gráfica sigue siendo muy utilizado en Japón, por lo que no es raro que programas que provengan de ese país utilicen este tipo de archivos.

PKZIP.- Desarrollado en 1.989 por Phil Katz (PKWARE), fue presentado en 1.986 como PKPAK, pero este no era otra cosa que un clón de ARC, por lo que después de varias denuncias y juicios Phil Katz abandonó el proyecto PKPAK y más adelante sacó al mercado PKZIP. En no mucho tiempo este compresor consiguió un buen prestigio y aceptación, ya que tanto su tasa de compresión como su rapidez eran superiores a las de ARC.
En 1.992 salió la versión 1.93b, que volvió a situar a este compresos a la cabeza del mercado, al menos hasta la salida del compresor RAR. Los archivos generados tienen la extensión .ZIP.

ARJ.- Desarrollado en 1.991 por Robert Jung, se trata de un magnífico compresor de código libre. Está disponible para varios sistemas, tales como DOS, Amiga, Windows, OS/2 o Mac. Gracias a su gran cantidad de opciones, a una alta tasa de compresión y una buena velocidad se convirtió en uno de los compresores preferidos por el público, siendo uno de los pocos compresores para DOS que han llegado hasta nuestros días. ARJ ofrece un buen rendimiento tanto en archivos binarios como en archivos de texto. Los archivos generados tienen la extensión .ARJ.

WINZIP.- Desarrollado a principios de los 90 como una interfaz gráfica para PKZIP, pasó a ser un programa totalmente independiente a partir de 1.996. Desarrollado especialmente para Microsoft Windows, se ha convertido en el estándar de los compresores. Las últimas versiones de Windows son capaces tanto de generar como de descomprimir archivos en este formato directamente. Los archivos generados tienen la extensión .ZIP, si bien es capad de descomprimir archivos .ARC y, mediante enlaces externos, archivos .ARJ y .LHZ. Se trata de un programa de distribución comercial, si bien dispone de una versión Demo totalmente operativa.

RAR.- Desarrollado en 1.993 por Eugene Roshal (RAR significa Roshal ARchive), desde su primera versión demostró tener una tasa de compresión superior al formato ZIP, así como una mayor rapidez. Esto, unido a que contaba con una interfaz a pantalla completa, lo que lo convirtió en el principal adversario de ZIP. Los archivos generados tienen la extensión .RAR.

WINRAR.- Se trata de la versión para Windows de RAR, y gracias a sus cualidades se ha convertido en el compresor comercial más utilizado. Tiene una interfaz sencilla, una tasa de compresión muy alta, una velocidad bastante alta y soporta una gran variedad de formatos, tanto de Windows como de otros sistemas.
Existe una versión de WINRAR para Linux, lo que amplia aun más el campo de este popular compresos.
Entre los formatos que soporta están RAR, ZIP, ARJ, LZH, ACE, LHA Y 7-ZIP. También soporta los formatos TAR, GZIP, UUE, JAR y BZ2. WINRAR también puede extraer ficheros de archivos .CAB y .ISO. Los archivos generados tienen la extensión .RAR, aunque pueden convertirse a la práctica totalidad de los formatos soportados (en realidad a todos menos a UUE, CAB e ISO).

7-ZIP.- Se trata de un compresor de software libre, desarrollado tanto para Windows como para Linux, pudiéndose utilizar la misma interfaz gráfica mediante Mine. Tiene una alta tasa de compresión, es muy rápido y soporta una gran variedad de formatos en descompresión, pudiendo comprimir en formato 7Z, ZIP, GZIP, BZIP2 y TAR. Los archivos generados por defecto tienen la extensión .7Z. Hay una versión portable que se puede ejecutar desde un Pendrive, sin necesidad de instalarlo en el sistema.

A partir de estos mencionados se han desarrollado una serie de compresores que tienen una dispar aceptación y distribución. Muchos de ellos son programas freeware, lo que los hace bastante atractivos. En definitiva, dejando a parte las opciones que tengan (que en el caso de los enumerados son muchas, buenas y útiles), lo fundamental en un compresor es que tenga una buena tasa de compresión y que haga su trabajo de forma rápida y confiable.